El fundador y compositor de la Banda Bordemar, que se presentó ayer en el marco de la cuadragésima primera Feria Internacional de Arte Popular, señaló que el público respeta y quiere la música de raíz folclórica.
Por Hernán Alvarado
La Banda Bordemar, formada en abril de 1983 en Puerto Montt, por profesores de música y que ha realizado desde entonces un trabajo de búsqueda de un lenguaje propio, mezclando la música folclórica con la de cámara y elementos de jazz y pop tuvo un exitosa presentación en el escenario del parque Ecuador. Su fundador, al término del concierto, se refirió a Concepción como "una plaza importante para cualquier banda. Nos sentimos muy contentos tocando acá. Siempre nos reciben con cariño".
-¿La música chilena es querida por el público?
-Existe un respeto por la creación nacional. Sin embargo, hay que ser conscientes que estamos bombardeados por un alto porcentaje de música extranjera. Pero nos encontramos con experiencias como ésta, la de la feria de arte popular en Concepción o la de los carnavales culturales de Valparaíso. Nuestras presentaciones en vivo siempre son exitosas. Es un reflejo por el gusto por lo nuestro.
-¿Qué nuevos paisajes están musicalizando?
-Estamos componiendo, como siempre, y reflejando nuestro paisaje sureño. Ofrecemos muchos conciertos en las localidades de nuestra región, además, estamos orgullosos de trabajar con niños. El año pasado, pude trabajar con distintos coros de niños de escuelas públicas de nuestra zona en una producción que se denomino "Los niños cantan a Neruda", fue muy bueno. Otro de los proyectos en que nos hemos sentido contentos ha sido el llamado "Colage" que consistió en crear la música ambiental para el Museo de Arte Moderno de Chile, MAM, de Chiloé.
-¿Qué importancia tiene para los músicos los derechos de autor?
-El trabajo de los músicos, más bien de cualquier expresión artística, es difícil. Producimos nuestros propios trabajos. Los conciertos son esporádicos, por lo tanto, el respeto por la creación es de importancia. Imagina que si no estuviese incorporado a la Sociedad de Derechos de Autor, SCD, no recibiría, como ha ocurrido, pagos desde Japón por ocupar nuestra música. De este modo, podemos seguir manteniendo la posibilidad de seguir creando nuevos proyectos musicales y ofreciendo nuestros conciertos. Eso es, respeto a la creación nacional.
-Concepción, ¿luego qué?
-Nos hemos encontrado con una novedad. Las Orquestas Juveniles e Infantiles de Chile están interpretando nuestra música y hoy nos encontraremos con la Orquesta Juvenil de la escuela San Luis de Contulmo para tocar un concierto dentro de las Jornadas Musicales que ellos tienen por esta semana. Nos sentimos muy gratificados por el honor que nos hacen los directores y jóvenes de estas orquestas, en todo Chile, interpretando nuestros más conocidos temas.
EL SUR Concepción, Chile, domingo 30 de enero de 2005
